La liposucción es una intervención quirúrgica muy común en el ámbito de la estética, pero su eficacia y seguridad no dependen solo del acto quirúrgico en sí, sino también del proceso de recuperación. Uno de los tratamientos más recomendados en el postoperatorio es el drenaje linfático manual, una técnica suave que acelera la recuperación, reduce la inflamación y mejora los resultados estéticos. En FisioClinics La Moraleja aplicamos protocolos especializados de drenaje linfático post-liposucción con excelentes resultados.
¿Qué ocurre en el cuerpo después de una liposucción?
Tras una liposucción, el cuerpo necesita tiempo para reabsorber líquidos, regenerar tejidos y adaptarse a su nueva forma. Aunque se haya eliminado tejido graso, queda inflamación, hematomas y una red linfática que ha sido parcialmente alterada por la intervención.
El sistema linfático, que se encarga de eliminar toxinas, líquidos y residuos celulares, puede verse temporalmente colapsado. Esto explica la hinchazón, la pesadez o la sensación de tirantez que muchos pacientes experimentan tras la cirugía. Si no se trata adecuadamente, esta acumulación puede retrasar la recuperación y afectar los resultados estéticos.
¿Cómo actúa el drenaje linfático manual?
El drenaje linfático es una técnica de masaje muy suave y específico, que sigue el trayecto natural de los vasos linfáticos y estimula el funcionamiento del sistema linfático superficial. A través de movimientos lentos, rítmicos y casi sin presión, el fisioterapeuta moviliza el líquido acumulado hacia los ganglios linfáticos, donde puede ser filtrado y eliminado.
Esto no solo reduce el edema postoperatorio, sino que también acelera la reabsorción de hematomas, mejora la oxigenación de los tejidos y favorece una regeneración más ordenada y saludable.
¿Cuáles son sus beneficios tras una liposucción?
Los beneficios del drenaje linfático después de una cirugía estética son tanto estéticos como funcionales. Entre los más importantes se encuentran la reducción de la inflamación, la prevención de fibrosis y la mejora de la textura de la piel. Muchas personas temen que la piel quede flácida o con irregularidades tras la liposucción; con el drenaje adecuado, se favorece una retracción progresiva y armoniosa del tejido.
Desde el punto de vista funcional, el paciente se siente más cómodo, con menos tirantez, menor dolor y una recuperación más rápida. Además, al activar el sistema linfático, se refuerza el sistema inmunológico y se mejora el estado general del organismo.
¿Cuándo empezar y cuántas sesiones son necesarias?
En FisioClinics La Moraleja, recomendamos comenzar el drenaje linfático entre 48 y 72 horas después de la cirugía, siempre con el visto bueno del cirujano. En las primeras semanas, es habitual realizar entre 2 y 3 sesiones semanales. A medida que mejora el estado del tejido, se van espaciando las sesiones según la evolución del paciente.
El número total de sesiones varía en función del tipo de liposucción, la zona tratada y la respuesta individual del cuerpo, pero en general se aconsejan entre 6 y 12 sesiones para obtener resultados óptimos.
¿Es doloroso el tratamiento?
No. El drenaje linfático es una técnica extremadamente suave. Aunque la zona tratada pueda estar sensible tras la cirugía, la maniobra del terapeuta es muy cuidadosa y respetuosa, y en ningún caso debe causar dolor. De hecho, la mayoría de los pacientes experimentan una sensación muy agradable de alivio y relajación durante la sesión.
Conclusión
El drenaje linfático post-liposucción no es solo una recomendación estética, sino una parte esencial del proceso de recuperación. Ayuda a reducir la inflamación, mejora los resultados visibles y contribuye al bienestar general del paciente. En FisioClinics La Moraleja te acompañamos en este proceso con tratamientos especializados, seguros y adaptados a tus necesidades, para que tu recuperación sea tan eficaz como el resultado que deseas alcanzar.
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