Ejercicios de Propiocepción para fortalecer la inestabilidad articular en los deportistas -  FisioClinics La Moraleja

Ejercicios de Propiocepción para fortalecer la inestabilidad articular en los deportistas - FisioClinics La Moraleja

Las lesiones articulares presentes en los deportistas generan una notable inestabilidad para realizar los diferentes movimientos articulares. Esto resulta ser preocupante para los jugadores, pero acá te estaremos explicando cómo con el  plan de tratamiento fisioterapéutico empleado en FisioClinics La Moraleja puedes recuperar tu estabilidad gracias a los ejercicios propioceptivos.

¿En qué consiste una lesión articular?

Las lesiones articulares son el tipo de lesión deportiva que afecta a la estabilidad y al correcto funcionamiento de la articulación, los ligamentos, los meniscos, y las superficies articulares. Las lesiones más conocidas son los esguinces de tobillo y de rodilla, así como las roturas de los ligamentos o de los meniscos de la rodilla.

Resulta importante entender que la articulación es la unión entre dos o más huesos y está compuesta por diferentes estructuras, la alteración de cualquiera de ellas va a repercutir en la estabilidad de toda la articulación, la estabilidad de la articulación se pierde.

Para tratar y rehabilitar este tipo de lesiones deportivas, el eje principal será precisamente la recuperación de la estabilidad de la articulación mediante ejercicios de propiocepción. Es decir, regulando la dirección y rango de movimiento.

¿Cómo se producen las lesiones articulares?

Estas lesiones pueden ocurrir debido al uso excesivo de una articulación, o puede ser debido a una lesión repentina, como un accidente o una lesión deportiva. Cuando se sufre una lesión articular (esguinces, fracturas o intervenciones quirúrgicas) los receptores propioceptivos se atrofian, produciéndose un déficit en la información que recogen, de esta forma, se es más propenso a sufrir otra lesión pues afecta en la coordinación y control del movimiento, tanto en nuestra vida diaria como en la actividad deportiva. Por ello, es importante que tras una lesión realices ejercicios propioceptivos guiados por tu fisioterapeuta.

Debido a las diferentes estructuras que componen a la articulación se pueden producir diferentes tipos de lesiones, entre ellas destacan:

  • Esguinces: distensión de los ligamentos que estabilizan una articulación. Suele producirse por una torcedura brusca.

  • Fracturas: es la discontinuidad o rotura ósea que puede ser parcial o completa.

  • Luxaciones: separación física de las estructuras óseas que componen la articulación.

  • Bursitis: inflamación de la bolsa serosa que se encuentra en medio de algunas articulaciones para evitar el roce directo entre los huesos.

  • Artritis: patología inflamatoria que afecta a una o varias articulaciones, y que puede estar relacionada con factores reumatoideos.

  • Artrosis: degeneración del cartílago que hay en las articulaciones.

Incidencia de las lesiones articulares en los deportistas

Las lesiones de las articulaciones son una de las más frecuentes del sistema músculo esquelético, produciéndose por diversos factores como la práctica deportiva, caídas o por deterioro debido a el propio paso del tiempo.

¿Qué es la propiocepción?

La propiocepción es la capacidad que tiene nuestro cerebro de saber la posición exacta de todas las partes de nuestro cuerpo en cada momento. Dicho de otro modo, a nuestro cerebro le llegan diferentes órdenes desde las articulaciones y los músculos acerca de la posición exacta en la que se encuentran. Esto permite regular los movimientos del cuerpo y establecer los límites en términos de dirección y respuestas a través de los reflejos.

El sistema propioceptivo es un factor esencial en el cumplimiento de las distintas actividades motoras…

La propiocepción es el sentido que nos proporciona la capacidad de detectar el movimiento y la posición de las articulaciones. La información que recoge el sistema propioceptivo permite que se puedan realizar ajustes en el control y ejecución de los movimientos, evitando el riesgo de lesión durante la actividad deportiva y ante mínimos gestos de la vida diaria, como por ejemplo pisar sobre terreno irregular, bajar escalones, dar una patada a un balón, lanzar un objeto. Esta información llega al cerebro a través de receptores nerviosos que se encuentran en nuestros músculos, tendones, ligamentos y articulaciones. 

Funciones sobre las cuales actúa la propiocepción

  • Regular el equilibrio

  • Coordinar los movimientos

  • Mantener el nivel de alerta del cerebro.

¿Cuáles son las estructuras responsables de la propiocepción?

  • Receptores nerviosos (propioceptores): Se encuentran en nuestros músculos, articulaciones, ligamentos, tendones y huesos. Esos receptores propioceptivos son el huso muscular, los órganos tendinosos de Golgi, los receptores de la piel y los receptores mecánicos articulares.

  • Nervios aferentes: Los nervios aferentes son los transmisores del sistema propioceptivo. Son los encargados de transmitir toda esta información recogida por los receptores propioceptivos y enviarla al sistema nervioso central (SNC – cerebro).

  • SNC: En el Sistema Nervioso Central se procesa toda esta información recibida. Es el “ordenador central” del sistema propioceptivo. Desde allí se envían las órdenes necesarias a las mismas u otras articulaciones o músculos, para producir la reacción deseada. 

El sistema propioceptivo nos protege ante las lesiones y nos permite reaccionar de manera rápida para prevenirlas… 

¿Es posible recuperar la estabilidad articular luego de una lesión?

Si es posible, esto gracias al reentrenamiento de la propiocepción articular de los segmentos afectados. El proceso de rehabilitación ayuda a recuperar la fuerza y estabilidad de la articulación.

Por eso recomendamos que se implementen estos tipos de ejercicios propioceptivos en los entrenamientos deportivos, para potenciar las capacidades neuromusculares y reducir los factores de riesgo lesivos.

A veces, en consulta, se nos presentan casos de pacientes con antecedentes de lesiones articulares que siguen molestando, y generan inestabilidad o falta de control de la articulación e incluso algunos refieren haber padecido varias disfunciones similares en la misma articulación. Para una buena recuperación y evitar posibles recaídas es importante el tratamiento y la orientación de la fisioterapia, no abandonar el tratamiento antes de tiempo y darle importancia a la recuperación propioceptiva.

¿Qué son los ejercicios propioceptivos?

Cuando hablamos de ejercicios de propiocepción o de entrenamiento propioceptivo, estamos refiriéndonos a un entrenamiento más bien neuromuscular. Gracias a la reeducación de la articulación lesionada, el deportista conseguirá potenciar la toma de conciencia y de sensibilización de las estructuras musculares, articulares, tendinosas y óseas.

El entrenamiento de propiocepción es un trabajo perfecto para evitar las lesiones, prevenir recaídas o ayudarnos en el proceso de rehabilitación de una lesión. Para trabajar la propiocepción no es necesario ejercicios muy complicados, la dificultad se irá aumentando de manera progresiva, dependiendo de la adaptación del jugador y del tipo de lesión, siendo ejercicios más intensos si se entrena a nivel deportivo.

¿Cómo funciona el entrenamiento propioceptivo?

Cuando sufrimos una lesión de los componentes de la articulación, la señal sensorial que recibimos en nuestro cerebro se ve alterada. Los ejercicios propioceptivos van a estimular directamente a las estructuras responsables de la propiocepción, desde los receptores nerviosos, los nervios aferentes y el sistema nerviosos central, esto con el fin de evitar nuevas lesiones y permite el correcto funcionamiento de estas estructuras.

Tras las lesiones articulares es necesario re-entrenar y recuperar la propiocepción del complejo articular. Una articulación con un sistema propioceptivo afectado por una lesión, hará que el cerebro no pueda reaccionar porque no le han llegado los impulsos de que se está produciendo en las estructuras propioceptivas: en la articulación, en los ligamentos y en los músculos y esto provoca que se pueda volver a producir. Esta alteración sólo se puede resolver con el entrenamiento neuromuscular de los propioceptores. Los ejercicios propioceptivos son los que nos van a ayudar a corregir de forma inmediata cualquier postura incorrecta que pudiese estar produciendo una lesión o alteración.

El momento de empezar con el trabajo propioceptivo será en las fases finales de la recuperación, cuando el edema se ha reabsorbido, la movilidad se ha recuperado, y se han empezado hacer ejercicios de fuerza muscular. Los ejercicios propioceptivos se van a basar en provocar desequilibrios para reforzar los ajustes musculares y articulares que son necesarios para mantener el equilibrio, la estabilidad y la postura.

¿Qué ejercicios propioceptivos se pueden emplear?

Existen múltiples ejercicios de propiocepción, donde cada uno tiene distintas finalidades y se centra en trabajar diferentes aspectos. Algunos buscan entrenar el equilibrio, otros la coordinación y otros la consciencia del entorno, todo dependerá de lo que el atleta esté buscando reforzar.

También, los ejercicios presentan dificultades variables. Unos son más sencillos que otros, lo más conveniente es comenzar con aquellos que se adapten al nivel de experiencia de cada atleta y, poco a poco, ir aumentando la dificultad de forma progresiva hasta alcanzar realizar los ejercicios más exigentes.

Alguno de los ejercicios propioceptivos que se pueden emplear son:

  • Equilibrio con una sola pierna

  • Equilibrio con una sola pierna con los ojos cerrados

  • Zancada sobre bosu

  • Equilibrio con una sola pierna mientras se recibe una pelota con intención de desestabilizar.

Beneficios que aporta los ejercicios propioceptivos

  • Previene una gran cantidad de lesiones: la propiocepción busca mejorar los reflejos, de esta forma, cuando se realizan ejercicios para mejorar este aspecto el cuerpo será capaz de reaccionar mejor ante los impactos propios de la práctica de algún deporte.

  • Mayor capacidad de absorción de impactos: estos ejercicios hacen que los músculos y articulaciones se adapten de forma automática a enfrentar mejor cualquier eventualidad y los impactos, minimizando los factores de riesgo gracias a la capacidad de absorción de impactos.

  • Se produce un fortalecimiento y agilidad articular: cuando se entrena la propiocepción, se le da una capacitación al cuerpo para fortalecer las articulaciones a través de cada movimiento involuntario, lo que le proporciona mayor agilidad.

  • Trabajaremos la fuerza, el equilibrio, la flexibilidad y la coordinación.

  • Permite al deportista ser más consciente de su postura, equilibrio y coordinación.

  • Mejora de la fuerza y el tiempo de reacción: estos ejercicios fortalecen los diferentes tejidos, haciéndolos más capaces de ejecutar una reacción más rápida y eficaz con respecto a su entorno.

  • Reacciones mecánicas efectivas: ya que, al tener una mayor consciencia del entorno, será más sencillo hacerle frente a cualquier respuesta refleja producto de un accidente o alteración.

  • Mejora del rendimiento deportivo y la técnica del gesto deportivo: Los ejercicios de propiocepción se centran en el entrenamiento de las respuestas automáticas del cuerpo, lo que significa una mejor coordinación y capacidad de enfrentar las situaciones inesperadas durante la práctica del deporte.

  • Balance en la descarga de peso corporal: ya que estos ejercicios aportan mayor información acerca del esquema corporal.

Recomendaciones para prevenir las lesiones de las articulaciones

Las lesiones de las articulaciones provocadas de manera espontánea por golpes o caídas no se pueden prevenir. Aquellas provocadas por el deterioro ya sea por el paso del tiempo o por la repetición constante de un movimiento, pueden prevenirse siguiendo una serie de consejos práctico mencionados a continuación:
  • Evita el sobrepeso: nuestra estructura ósea está diseñada para soportar nuestro peso ideal, pero, si un paciente tiene un peso mayor a la capacidad de su estructura ósea, estará sufriendo un sobreesfuerzo para el que no está preparado y que provocará diferentes disfunciones.

  • Trabaja con ejercicio de forma moderada las articulaciones, los músculos y los ligamentos: tener un movimiento equilibrado y sin sobreesfuerzos repetitivos nos ayudará a tener unas articulaciones más saludables.

  • Si te estás iniciando en la práctica deportiva sé consciente: no sometas a tus articulaciones a un estrés para el que no están preparadas. Incrementa la carga de entrenamiento progresivamente y, de manera ideal, consulta con un especialista deportivo que te ayude y asesore en la planificación deportiva.

  • Lleva una correcta alimentación y hábitos de vida saludables: una correcta alimentación con una dieta equilibrada nos ayudará a prevenir las enfermedades degenerativas de las articulaciones. El calcio y el colágeno en su dosis adecuada fortalecerán las articulaciones previniendo así la aparición de disfunciones.

Un buen trabajo propioceptivo mejora la funcionalidad y previene recaídas o futuras lesiones, permitiendo al paciente una vida normal sin limitaciones y una vuelta deportiva óptima. Los ejercicios propioceptivos ayudan a mejorar la fuerza, coordinación, equilibrio y estabilidad, con ellos mejorará el tiempo de reacción ante determinadas situaciones, sobre todo durante la práctica deportiva.

En FisioClinics la Moraleja - Madrid contamos con fisioterapeutas altamente capacitados en el área de Fisioterapia deportiva para brindarte las herramientas para un tratamiento global e individualizado. Además, ofrecemos una intervención preventiva que favorece a los grandes equipos para evitar la lesión de sus jugadores.

 

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